jueves, 6 de agosto de 2009

Fanaticos piden Nobel de la Paz para Michael Jackson y la gente del Nobel dice: NO

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Que Michael Jackson recibiera póstumamente el Premio Nobel de la Paz 2010 parece una idea muy jalada de los pelos, sin embargo para un grupo de fans del artista no lo es, al menos eso desean los impulsores de una campaña en Internet, que pretende reunir un millón de firmas.

Mientras tanto, un portavoz Comité Nobel en Oslo confirmó los pedidos: "Realmente recibimos una gran cantidad de mails con ese texto". En el primer día de campaña, al parecer, se reunieron 15 mil firmas en Internet. Sin embargo, los jurados se negaron de inmediato y con decisión: dijieron "Es completamente imposible. No existirá ese premio". El Nobel no puede entregarse en ningún caso a un muerto. Y, además, sólo determinadas personas o grupos, por ejemplo, anteriores ganadores del galardón, legisladores o instituciones científicas, están habilitados para nominar candidatos.

Los impulsores de la campaña, sin embargo, considerarán este argumento un simple obstáculo burocrático. Aspiran a algo más elevado y creen que el rey del pop, fallecido a los 50 años, "se entregó toda su vida sin descanso y desinteresadasmente a la mejoría mundial de las condiciones de vida de los niños así como de toda la humanidad". Palabras que alguno podría poner en duda recordando las acusaciones de pedofilia contra Jackson. Claro que fue absuelto por la Justicia.

Hasta ahora, nunca un artista dedicado profesionalmente al entretenimiento recibió el Nobel de la Paz, aunque dos colegas de Jackson, el cantante de U2 Bono y Bob Geldof figuran desde hace años entre los candidatos, porque luchan públicamente por mejorar las condiciones de vida en los países pobres.

Que amigos, fans y otros hagan presión a favor de su favorito por el premio dotado con diez millones de coronas suecas no es nada nuevo. "Forma parte del negocio, pero no tiene la menor influencia en nuestra decisión", comentó el director del Instituto Nobel en Oslo, Geir Lundestad. Y añadió, sonriendo, que en los años 40 llegaba al Instituto en Oslo, situado en la Henrik Ibsen Gate 51, ese tipo de correspondencia pidiendo la entrega del premio a Adolf Hitler (un chiste un muy jalado para mi gusto).

vía: infobae